Su historia está vinculada al Monasterio de Santa María de la Vid desde sus orígenes. De hecho, la leyenda sitúa en este valle la aparición - hallazgo milagroso de una imagen de María por parte del rey Alfonso VII. Actualmente, la Cofradía de Nuestra Señora de la Concepción del Monte se ha encargado de las reformas en la gruta y sus accesos. Dos veces al año (agosto y septiembre) realizan un peregrinaje expresando su fervor filial a la Virgen del Monte. Durante la época navideña, varios pequeños belenes son colocados en la roca que precede la entrada a la ermita, permitiendo el juego de su búsqueda a los pequeños pero también a los mayores. Pero además, dice la leyenda que fue aquí donde tuvo lugar la cidiana Afrenta de Corpes a las hijas del Cid allá por el siglo XII. No te pierdas el encanto de las chimeneas de hadas en el recorrido de este sendero por el valle del Vallejo, cuyas vistas del Monasterio de La Vid y de los viñedos ribereños es formidable.